miércoles, 4 de abril de 2012

Hoy no puedo acompañarte




   Antes para mi la Semana Santa era algo que comparaba con la fiesta del Carnaval, me gusta ver las chirigotas, me provoca simpatía pero jamás me ha gustado disfrazarme ni ir a una fiesta a que un pesado disfrazado se aproveche de su temporal anonimato para estar dando el coñazo toda una noche.

   Pero hace exactamente hoy diez años, intenté experimentar algo nuevo. De todos es sobradamente conocido el fervor de la ciudad de Sevilla y de sus gentes por la Semana Santa. Yo no llegaba a entender por qué si llovia, los costaleros y los nazarenos se inflaban a llorar porque su Hermandad no saldría a las calles de la capital Hispalense. La Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla aquel año 2002, como viene haciendo en la actulidad, pidió voluntarios al resto de destinos de España para realizar las escoltas de los pasos de las distintas Hermandades. En Sevilla al igual que en muchos puntos de nuestra geografía, en las procesiones, cada paso lo van escoltando dos Guardias Civiles. Aquel año y picado por la curiosidad de cómo sería la famosa Semana Santa sevillana me apunté voluntario.

   De antemano llevaba la incertidumbre de si a pesar de ser religioso y creyente hasta la médula aquello me llenaría espiritualmente o me resultaría un tostón. Tenía muy pocos datos de la Hermandad en la que prestaría mi apoyo, era la Hermandad Sacramental de las Siete Palabras, el paso que escoltaría era la imagen de Nuestra Señora de la Cabeza (tallada en 1965) y la medalla de la Hermandad me la daría antes de procesión el Hermano Mayor de la Junta de Gobierno, eso era todo lo que me habían explicado telefónicamente.

   No es necesario reseñar que si repetí en ocho ocasiones más fue por algo. Para empezar, en Sevilla a lo que nosotros llamamos procesión ellos lo denominan Estación de Penitencia. El Palio de la Virgen de la Cabeza (Palio se denomina a los tronos de las imágenes de Virgen, no de Cristo), sale puntualmente de la capilla a las 20:20 horas y debe recogerse de nuevo en su sede a las 02:30 horas. Cabe hacer mención que todos los pasos de Sevilla tienen un horario establecido que deben cumplir a rajatabla, ya que si no es así, una Junta establecida especialmente para el control de los tiempos en los distintos puntos impone sanciones a la Hermandad que infrinja el horario. Por la conocida Plaza de la Campana hay que pasar a tal hora, por la Calle Sierpes a otra hora, por el Ayuntamiento a otra hora y asi sucesivamente hay que cumplir rigurosamente los horarios para no atrasar al resto de Hermandades, ya que a determinadas horas puede haber por las calles de Sevilla más de 30 pasos realizando Estación de Penitencia.




   Los costaleros, los músicos (al palio que nos ocupa hoy le acompaña la extraordinaria Banda de Alcalá de Guadaira), los nazarenos, los monaguillos, en fin todos, al dia siguiente de su Estación, el mismo Jueves Santo, ya comienzan a preparar el año siguiente, comienzan a pensar en ese dia del año próximo, tachan los dias del calendario; esa ilusión es la que se convierte en pena y desdicha extrema si el Miércoles Santo llueve y no se puede salir a las calles de Sevilla. Ahora lo entiendo, ahora se lo que es la bulla (millones de personas que se agolpan en las calles para ver las Hermandades y hay literalmente que empujar para que coja el paso), ahora se lo que es llevarme a Madrid en mi uniforme el olor del incienso cofrade (como alli se le llama al incienso de varios tipos mezclado con romero). Sevilla en Semana Santa es mucho más que las imágenes religiosas.

   Quiero recordar hoy a todos los costaleros y a los capataces de mi palio, Rufino y Joaquin, que hoy me han llamado para decirme que me van a echar mucho en falta, "pero no te preocupes Pepe, mi arma, ten el teléfono contigo que te voy a llamar en directo para dedicarte una levantá pa' que la Virgen os ayude a que todo vaya estupendamente", impresionantes personas, inmejorables.

   Sabes Madre el motivo de mi ausencia hoy. Lo que siempre te pido, cuida mucho de los que se han marchado junto a ti, protégenos, no nos abandones ni un sólo segundo, y a diferencia de los años pasados en vez de a un metro de ti, te lo pido a más de 600 km, pero cuida de todos mis amigos y seres queridos y especialmente de mi esposa, que todo vaya rápido, bien, que Laia nazca sana y ayúdanos a ser padres, ardua tarea hoy en dia.

  Te voy a echar mucho en falta hoy, a ti, a la gente que te porta y te sube al cielo en cada levantá y a Sevilla entera. El año que viene volveré a estar a tu lado.


4 comentarios:

  1. Cada dia me gusta mas lo que nos cuentas. Creo que este año vamos a echar de menos muchas cosas... Pero lo de Sevilla es por algo muy especial . El año que viene, si Dios quiere, ya estara Laia echa un bichete por estas fechas.Hasta mañana .

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  2. Bonita y emotiva historia, pero he de coregirte, la primera vez que pediste salir en una cofradia en Sevilla, no fué en la Hermandad de las Siete Palabras, sino en la Hermandad de Los Javieres, que desgraciadamente ese año no pudo hacer su Estación de Penitencia debido a la lluvia, solo espero y deseo, que aunque lo habias olvidado, al menos conserves la medalla que en la Hermandad de los Javieres, se te entregó con mucho cariño.

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  3. Mis mejores recuerdos y deseos para esta bella y gran ciudad, su Semana Santa, su Feria y todos los sevillanos. En especial a aquellos que en su día, hicieron y siguen haciendo posible, que los que por algún motivo, en algun momento del largo camino que es la vida, escogimos como ciudad de destino, tuviesemos la grandísima suerte de conocer y disfrutar de su ciudad. Sobretodo del enorme cariño, alegría y amistad que la gente de Sevilla ofrece y que hace que, aunque por caprichos del destino tengamos que dejar atras tan maravillosa ciudad, a diario recordemos con gratitud esas muestras que no hacen mas que provocar en los que hemos experimentado tales sensaciones, que no cesen las ganas de volver algún día no muy lejano, a tan singular Ciudad, a disfrutar de esa magia, ese color tan especial, ese olor tan característico de su Semana Santa que te envuelve y que como por arte de magia te hipnotiza para toda la vida. Un enorme abrazo para mi AMIGO Jose, Sevilla y todo los Sevillanos.

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    1. SEVILLA ES QUE TIENE UN COLOR ESPECIAL, Y LAS SEVILLANAS TAMBIEN.

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